miércoles, 21 de octubre de 2009

Respuesta y Movilización frente a la Crisis

La Coordinadora Anticapitalista de Extremadura frente a la Crisis se constituyó en la primavera de este año. El 28 de marzo, coincidiendo con la convocatoria del Foro Social Mundial, se "bautizó" en la calle, con una manifestación que recorrió las calles de Mérida.

Desde entonces, hemos seguido participando en distintas localidades tanto en el impulso de algunas asambleas de parados como estimulando la movilización, tan necesaria como escasa, por desgracia, en este tiempo de crisis.

Hemos decidido retomar el trabajo de reorganización de la Coordinadora, vinculando ésta a la promoción de respuesta y movilización social. No valen ya los paños calientes ni las excusas. No podemos permanecer más tiempo callados ni agarrotados por la impotencia. No basta con analizar la crisis, hay que plantar cara al capital. Cuando vamos camino de los 5 millones de parados y más de 1.110.000 familias tienen a todos sus miembros en desempleo no valen los subterfugios ni los autoengaños. Cuando la Banca y las grandes empresas, los mismos que se inflaron los bolsillos en la época de las vacas gordas, asaltan los fondos públicos a plena luz del día y con la complicidad de los gobernantes, no alcanza con la lamentación en el bar o ante el televisor.

Son estas consideraciones y, sobre todo, la voluntad de luchar, de no rendirnos y de no acomodarnos, lo que nos ha llevado a convocar una Charla Coloquio que tiene por título "Respuesta y Movilización frente a la Crisis", que se celebrará el viernes día 6 de noviembre, a partir de las 19:30 horas en el Liceo de Mérida. Para introducir el debate contaremos con dos compañeros de enorme valía, comprometidos, de los que llevan luchando toda la vida y que representan muy bien la orientación plural y unitaria que pretendemos sea el distintivo de la Coordinadora Anticapitalista. Contaremos con la participación de Luís González, coordinador estatal de Ecologistas en Acción, una de las organizaciones que de manera más sistemática y rigurosa viene analizando y luchando contra esta crisis sistémica, social y ecológica. Y también intervendrá Enrique de Castro, párroco de San Carlos Borromeo, en Entrevías, militante contra la injusticia social desde el ejemplo personal y cotidiano, y que ha participado desde sus inicios en la construcción de movimientos contra la exclusión social tales como la Coordinadora de Barrios o Madres contra la Droga.

Os pedimos que, en la medida de lo posible, divulguéis este acto entre todas las personas que en vuestra opinión puedan estar interesadas.

miércoles, 7 de octubre de 2009

CONTRA LA CRISIS, LUCHA OBRERA

Las cifras de la depresión económica en el 2009 según los datos del gobierno, son bastante elocuentes: 3.700.000 parados, más del 17% de la población. De éstos 1.300.000 no tienen acceso a la prestación por desempleo. La economía sumergida en España ha aumentado en un 30%, lo que significa peores condiciones de trabajo para la clase obrera. Sin embargo, la banca ha aumentado beneficios de forma escandalosa. La recesión se prevé larga y seguiremos en ella hasta pasado el 2010 según las previsiones; pero aun entonces se mantendrá el aumento de la desigualdad que se está produciendo con las medidas anticrisis; a menos que los trabajadores se opongan a perder sus condiciones de vida y sean capaces de organizarse para exigir sus derechos.

El gobierno ha propuesto un plan para salir de la crisis: el plan E de Zapatero. En él se contemplan ayudas a la Banca por 50.000 millones de euros de los cuales ya se han gastado más de 19.000; según otras fuentes la banca recibiría 100.000 millones de euros para resolver los problemas financieros. Otras medidas consisten en ayudas a las familias para estimular el consumo, entre las que destaca los más de 37.000.000 de euros para promover la venta de coches. También ayudas a las PYMES y los autónomos para dinamizar la economía por valor de más de 1.600 millones de euros. Y el plan estrella de 8.000 millones de euros para los Ayuntamientos, de los cuales se han invertido más de la mitad, 5.000 millones, ocupando a más de 400.000 personas de las cuales 170.000 son nuevos empleos (fuente página web del Gobierno: http://www.plane.gob.es/que-es-el-plan-e/)

El gobierno ha prometido un subsidio de 420 euros durante 6 meses a los trabajadores inscritos en la oficina del paro que hayan agotado el subsidio de desempleo después del 1 de agosto. La Asamblea de Parados ha denunciado que la mayor parte de 1.300.000 parados y paradas que no tienen prestaciones de desempleo, quedarán sin posibilidades de acceder a ese subsidio. Frente a esa medida timorata y discriminatoria, la Coordinadora Extremeña contra la Crisis del Capital propone la creación de una renta básica que garantice una vida digna, para todos los ciudadanos sin exclusión.

La financiación del plan E vendra de un aumento de los impuestos directos: dos puntos del I.V.A. general y un punto del I.V.A. especial, que son impuestos sobre el consumo y afectan sobre todo a los trabajadores. Del mismo modo que las reformas fiscales de los últimos años han favorecido a las empresas, reduciendo los impuestos para las capas sociales con más ingresos, la política fiscal de este gobierno no va a cambiar.

En resumen las medidas del gobierno benefician en primer lugar al capital financiero que recibe una buena cantidad de dinero para tapar los agujeros que los propios banqueros han creado. Después de veinticinco años de neoliberalismo, criticando la intervención del Estado en la economía, ahora los ricos piden a gritos la intervención estatal para salvar su contabilidad mentirosa, o creativa como los economistas prefieren decir.

En segundo lugar, quieren estimular el consumo, en lugar de promover la austeridad necesaria para resolver la crisis económica. España irá a la cumbre del clima en Conpenhague contra el cambio climático, sin haber cumplido sus compromisos internacionales, y sin intención de cumplirlos. Las clases medias podrán seguir con su tren de vida consumista para evitar que se hunda esta economía que despilfarra los recursos escasos. Claro que según los ideólogos del sistema el 85% de la población en España pertenece a las clases medias, así que es posible que el gobierno salve los muebles y pueda aguantar en las próximas elecciones.

Ésta es, en efecto, la lección de la democracia formal: hay que gobernar para seguir gobernando, y ya se sabe que en el sistema capitalista el bien público importa un pito, lo que cuenta son los intereses privados. No hay diferencia entre la derecha y la izquierda pues ambas son el gobierno delegado de los mismos capitalistas propietarios y participan en la estabilidad del mismo Estado, una misma monarquía.

En tercer lugar, los que sufren las consecuencias de la crisis son los trabajadores, pues los empleos que se crean son ínfimos en cantidad y calidad, con respecto a lo que es necesario crear. Son millones de parados que al día de hoy se encuentran en dificultades para mantener una vida digna; muchos jóvenes dependen de la ayuda familiar de sus mayores que cobran la paga de jubilación; otros están hipotecadas por préstamos que no pueden pagar. Especialmente el paro ha afectado a los trabajadores inmigrantes; éstos han sido los creadores de la plusvalía de la economía española en los años de bonanza, y sirven ahora de colchón para que el batacazo de nuestra economía no sea tan duro.

La crisis financiera proviene de los abusos de estos años pasados; detrás de esos abusos está la explotación de los trabajadores y la esquilmación de la tierra. Ahora los contables que han falsificado la economía ni siquiera se sonrojan cuando se descubren sus trampas: piden más dinero; lo que significa exprimir todavía más a la clase obrera. Pero esta crisis no es nada comparada con la que tiene que llegar por causa del agotamiento de las riquezas naturales en el planeta Tierra y los problemas ambientales derivados de la mala gestión de los recursos.

No es difícil mostrar la causa de esta situación a la desorganización y desequilibrio de la economía capitalista. El mercado no puede resolver los problemas a los que se enfrenta la humanidad moderna; en el siglo XXI es necesario falta planificar la economía a nivel mundial y respetar los compromisos internacionales. Ninguno de estos dos requisitos son cumplidos por el Estado español dependiente de los intereses de las grandes empresas transnacionales. Pero la fuerza para cambiar las cosas no nacerá de las capas sociales acomodadas, que carecen de conciencia sobre los problemas reales de nuestro mundo. Sólo los trabajadores en lucha pueden cambiar la situación.

Para conocer las consecuencias de la crisis capitalista no hace falta recurrir a las frías cifras de los economistas, que muchas veces disfrazan más que enseñan la realidad. Las dificultades por las que están pasando millones de personas son evidentes en la vida cotidiana de nuestra sociedad. Por eso, los trabajadores se están empezando a organizar para contestar la política capitalista del gobierno; una importante movilización está empezando a desarrollarse en distintos lugares del estado español, como la marcha contra la ley de extranjería, las manifestaciones del SAT en Andalucía y la Asamblea de Parados de Cataluña, Galicia y País Vasco, las manifestaciones de oposición contra los ERE’s que se producen en todo el Estado español, etc. Es hora de organizarse también aquí en Extremadura para converger en las luchas obreras contra el dominio capitalista en nuestra sociedad.

COORDINADORA EXTREMEÑA CONTRA LA CRISIS DEL CAPITAL